Hubert, hijo de pintor y padre y abuelo de pintores, fue un famoso retratista y miniaturista, cuya popularidad se eclipsó con la aparición de su hijo François-Hubert Drouais. Su formación comenzó en Ruán y continuó en París, adonde Hubert se mudó en 1717. Allí entró en el taller del retratista Jean-François de Troy, trabajando principalmente como copista de su maestro. Aprendió a manejar varias té
Se formó en la Real Academia de París junto a Antoine Boizot. En 1764 ganó el premio de Roma, que le permitió completar su educación artística en la Academia Francesa de dicha ciudad. Viajó por Italia, aficionándose a la Antigüedad clásica y a los maestros de la escuela boloñesa y veneciana, resaltando la impronta dejada por las composiciones de Veronés. A su regreso a Francia, en torno a 1772, co