Chicos dibujando
1890. Óleo sobre lienzo, 34 x 58 cmNo expuesto
El lienzo representa dos niños dibujando sobre un tablero apoyado en una silla, en un interior doméstico. La luz entra por los cristales de la ventana entreabierta, iluminando sus rostros sonrientes y muy atentos a su ocupación. Se trata de los dos hijos varones de Pinazo, José e Ignacio, de los que el artista llegó a acumular un sinfín de tiernos retratos, apuntes y borrones marcadamente íntimos, centrados todos ellos en la pura contemplación de sus propios vástagos y que ilustran pormenorizadamente el crecimiento de estos.
De este lienzo, como de muchas otras obras del autor, debe subrayarse el hecho de que su asunto, un inocente entretenimiento infantil, consista en la imitación por los chiquillos de las ocupaciones paternas, que serían las que terminaron por convertirse en sus ocupaciones profesionales, lo que produce una especial complicidad, por encima de otros momentos captados por Pinazo de las vidas de sus hijos, entre el complacido autor, la obra y los retratados. De hecho está realizada desde el embeleso del padre y debido a eso mismo es fácil detectar en ella el íntimo silencio del observador que, aunque se muestra a distancia, tutela a sus vástagos.
La recreación atmosférica, la abstracción del fondo de colores muy sobrios, sumido en una penumbra casi total, y la rapidez dibujística de la obra, dotan de un poderoso y especial atractivo por encima de otras versiones muy parecidas ( Texto extractado de G. Navarro, C.: “Chicos dibujando”, Ternura y melodrama. Pintura de escenas familiares en tiempos de Sorolla. Conselleria de Educacio y Cultura, p. 152).