Lucio Anneo Séneca
1894. Escayola. Depósito en otra instituciónEl filósofo hispanorromano Lucio Anneo Séneca, con el torso desnudo, se sienta sobre una silla curul, mientras una toga o manto le cubre desde la cintura. En el conjunto se aprecian dos niveles: uno inferior, estático, frío e inexpresivo, que se corresponde con el cuerpo cubierto por la toga, y por silla; y otro superior, formado por el torso y cabeza del filósofo, en el que se concentra la vitalidad, aunque velada, de esta obra. La cabeza de Séneca ofrece la imagen de un hombre de edad madura. Su mirada es el elemento expresivo, casi único de la obra. Condenado por Nerón al suicidio, está aquí representado en los últimos momentos de su vida, justo cuando se dirigee a sus discípulos para ofrecerles el ejemplo de su vida. En un último intento de comunicación, extiende su brazo derecho, caído, al frente, aportando a su ya lánguida expresividad, un gesto de acercamiento a sus discípulos. Técnicamente la obra denota un alto nivel de realismo, especialmente en la cabeza y torso, en los que el escultor ha agudizado los detalles anatómicos. Fue presentada a la Exposición Nacional de Bellas Artes de Bilbao, de 1894, y posteriormente a la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1895, en Madrid, donde fue premiada con medalla de segunda clase (Texto extractado de Montes Ruiz, R.: Mateo Inurria en el Museo de Bellas Artes de Córdoba, 1996, p. 54).