Proyecto de retablo para San Andrés, de Madrid / Cabezas
Hacia 1643. Aguada parda, Pluma, Preparado a lápiz sobre papel verjurado, amarillento, 286 x 124 mm.Un retablo imponente, de elegantes proporciones, no incluye demasiados componentes pictóricos o escultóricos, confiriendo así mayor importancia a la arquitectura y su ornamentación. En el registro inferior no hay elementos figurativos de pintura ni escultura, solo los compartimentos que flanquean el tabernáculo coronado por la urna que guardan los restos de San Isidro, venerados en aquel momento en la parroquia madrileña de San Andrés. El cuerpo central está dominado por la pintura monumental de San Andrés en la Cruz, acompañada de las figuras escultóricas de San Isidro y Santa María de la Cabeza, algo pequeñas, que miran hacia la imagen del santo titular. En el ático, un compartimento blanco, posiblemente –según ha propuesto Pérez Sánchez- para un grupo representando el Calvario, o tal vez para la escena del recibimiento de San Andrés en el cielo. Las molduras sugieren que estaba destinado a acoger una pintura. A ambos lados del compartimento en blanco aparecen los cuatro Padres de la Iglesia: dos de pie y dos sentados.
Las proporciones alargadas de este diseño intensifican la impresión de gracia y refinamiento característicos de los dibujos arquitectónicos de Cano desde 1640 en adelante.
En el dorso se observan algunas cabezas, esbozadas a carboncillo. (Texto extractado de Véliz, Z., Alonso Cano (1601-1667). Dibujos. Catálogo razonado, Fundación Marcelino Botín, 2009, p. 444-447).