Retrato de Luis Álvarez Catalá (Madrid, 1836-1901), pintor que estuvo estrechamente vinculado al Museo del Prado, del que fue sucesivamente Secretario, Subdirector y Director. A diferencia de lo que ocurría con otros directores, el Museo no conservaba retrato suyo. Por ello, tiene interés esta efigie realizada, además, durante el ejercicio de su dirección, con motivo del hecho más sobresaliente en
Charles Durant, llamado Carolus-Duran, es todavía un pintor mal conocido a pesar del éxito que gozó en el París de finales del siglo XIX, encarnando el prototipo de artista caído en el olvido después de haber vivido colmado de honores. En el Salon de 1866 alcanza una medalla con El asesinado, adquirido en 5.000 francos por el Estado para el Museo de Lille. Esta suma de dinero le permite viajar a E