La obra refleja una advocación muy singular de la Virgen María que se popularizó en Andalucía en el siglo XVIII. La madre de Jesús aparece sentada en una roca y rodeada de ovejas. Lleva una rosa en la mano izquierda y acaricia a una de las ovejas, que lleva otra rosa en la boca. En la parte superior se observan ángeles entre nubes; al fondo, el arcángel san Miguel baja a liberar con su espada a un
Copia de gran calidad, en la que aparece el pintor sevillano de medio cuerpo en un marco oval, situando la figura en un marco ilusionista, con efectos de trampantojo.Tobar retrató a importantes personajes de la corte del círculo de Isabel Farnesio, destacando por el excelente tratamiento y su capacidad para atrapar de un modo enérgico la expresión, siendo uno de los mejores retratistas de esos año
Esta fotografía aparece por primera vez en el catálogo de 1872. La atribución a Murillo es de la época en que la fotografía se tomó, actualmente se atribuye a Alonso Miguel de Tobar.
Esta fotografía aparece por primera vez en el catálogo de 1872. La atribución a Murillo es de la época en que la fotografía se tomó, actualmente se atribuye a Alonso Miguel de Tobar.
Hacia 1865 Laurent comenzó a fotografiar los cuadros del Museo del Prado. Esta fotografía aparece en el catálogo de 1867, por lo que la toma debió realizarse entre 1865 y 1867. Anteriormente estuvo atribuida a Alonso Miguel de Tobar.