El artista barroco flamenco Peter Paul Rubens fue también un erudito humanista, coleccionista de arte y diplomático. En 1628, Rubens viajó a Madrid para entrevistarse con Felipe IV (1621-1665) como parte de sus gestiones en la negociación de un tratado de paz entre España e Inglaterra. Durante su estancia allí pintó, entre otros temas, retratos de la familia real española. Felipe IV se impresionó