En Las Metamorfosis del poeta Ovidio se relata con gran precisión el momento en que Mercurio, de camino a Atenas, se topó con un grupo de Ninfas que portaban sus ofrendas a la diosa Palas, enamorándose inmediatamente de Herse, la más hermosa de ellas. El lienzo, de formato extremadamente horizontal, sitúa la escena en un paisaje boscoso, en el que las ninfas charlan o juegan, de camino al templo d
El cuadro es fruto de dos actuaciones realizadas en épocas diferentes. Velázquez pintó la superficie ocupada por las figuras y el tapiz del fondo, y durante el siglo XVIII se añadieron una ancha banda superior (con el arco y el óculo) y bandas más pequeñas en los extremos derecho, izquierdo e inferior (añadidos que no se aprecian en el actual montaje de la obra). Esas alteraciones han afectado a l
El pago, en julio de 1629, de 100 ducados a Velázquez por cuenta de una pintura de Baco que había hecho para el rey nos informa sobre la fecha aproximada de la obra e identifica a su destinatario. Estamos en las vísperas del primer viaje del pintor a Italia, cuando llevaba poco más de un lustro de trabajo al servicio del rey y acababa de conocer a Rubens. En esa época se estaba especializando en l
La figura del Sátiro guarda relación compositiva con otros lienzos de similares dimensiones, como son La Fortuna (P1674), Mercurio (P1677), La Razón (lienzo desaparecido, boceto conservado en el Museo Provincial de Bellas Artes de La Coruña no284) que representan personajes aislados, la mayoría de los cuales son de mano de Rubens y otros con colaboración de taller. Este tipo de representaciones de
La diosa Diana duerme vestida con un atuendo de tipología clásica, envuelta en un manto sobre el que destaca una piel de leopardo. A su lado aparecen el carcaj con flechas, el arco y una trompa de caza; sobre su cabeza un creciente brilla en la oscuridad, contemplando así la caracterología simbólica de la divinidad clásica. La pintura describe una de las mas refinadas y exquisitas visiones mitológ
La escena representa el mito de Diana y Acteón narrado por Ovidio en el libro III de las Metamorfosis (138-252), en el que la diosa es sorprendida bañándose desnuda junto a sus ninfas durante un descanso de una cacería, lo que desatará su ira contra el cazador transformándolo en ciervo. Las figuras son de Hendrik de Clerck y el bosque se atribuye a Denis van Alsloot. La luz entra desde el fondo, p
El carro triunfal de Baco con todo su cortejo en relación con la hostilidad del rey Penteo aparece en libro III de las Metamorfosis de Ovidio (528 seq.): "(...) Ha llegado Líber; los campos resuenan con gritos de alborozo; corre el gentío; matronas y muchachas mezcladas con hombres, la chusma y los grandes señores acuden al nuevo culto. "¿Qué locura, hijos de la serpiente, prole de Marte, ha aturd
Esta pintura muestra una cacería de Diana con sus ninfas, un tema repetido en la pintura de Rubens y también en las colecciones reales. Así, aparece también en la decoración de la Torre de la Parada y en el Salón nuevo del Alcázar, como parte de las ocho obras que el artista se trajo consigo en su segunda visita a España entre 1628-1629. En este caso, a diferencia de otros, no vemos el momento en
La escena se desarrolla en el primer plano, ocupado por un gran farallón de roca y árboles que se abre por la derecha hacia un paisaje luminoso y cerrado al fondo por montañas. La articulación espacial entre el primer plano oscuro y el fondo luminoso es todavía algo rígida. El color está aplicado en las figuras con una pincelada lisa y uniforme que confiere a los desnudos un aspecto nacarado. Por
El impacto de una sorprendente revelación, explorado en clave de historia sagrada en La túnica de José (Patrimonio Nacional, Real Monasterio de San Lorenzo del Escorial, núm. inv. 10014694), tiene su complemento mitológico en La fragua de Vulcano, el otro lienzo que Velázquez trajo a Madrid después de su estancia en Italia, adquirido con su pareja para las colecciones reales en 1634 y destinado al
Se trata de una escena de carácter pagano, en la que se representa la ofrenda que los bacantes, o seguidores de Baco, hacían a su dios. En el centro un sacerdote ofrece el sacrificio sobre un altar, ante la estatua de la divinidad coronada de hojas de vid. Alrededor, los asistentes a la fiesta beben o se muestran absolutamente ebrios y dormidos merced al efecto del vino. Esta escena mitológica dem
La caída de los gigantes es un episodio brevemente narrado por Ovidio en sus Metamorfosis, Libro I (151-155), en la cual los gigantes que habitaban la tierra querían llegar al cielo y por ello fueron castigados por los dioses: "(...) Y para que el elevado cielo no estuviera más seguro que la tierra, los Gigantes, se dice, aspiraron al reino celestial, y levantaron montañas apiladas hasta las altas
Progenitor de la raza de los centauros, Ixión intentó suplantar a Júpiter en el lecho de Juno, por lo que fue castigado a girar eternamente atado a una rueda para expiar sus desmanes. Ribera nos muestra una violenta imagen, con el condenado boca abajo, acentuando la tensión dramática mediante la luz, la monumentalidad de las figuras, las forzadas anatomías y la expresividad gestual. Esta obra es l
Copia la obra original de Guido Reni titulada Baco y Ariadna, desaparecida en la actualidad, pero conocida a través de copias. Perteneció a la colección de Carlo Maratti, a quien se le atribuye.
Esta pintura representa el momento en el que el dios levanta con su brazo derecho una espada, que dirige hacia el cuello de Argos, el pastor de cien ojos encargado de vigilar la vaca en que había sido convertida la ninfa Io por Juno, para alejarla del acoso de Júpiter, su marido. Como otros episodios de la vida amorosa de este dios, formaba parte importante de las Metamorfosis de Ovidio, el princi
La fuente literaria de las Furias son las Metamorfosis de Ovidio (IV, 447-64) y la Eneida de Virgilio (VI, 457-58), que narran el sufrimiento eterno en el Hades de Ticio, cuyo hígado devoraba un buitre por haber violado a Latona; Tántalo, condenado a procurarse en vano alimento y bebida por servir a su hijo Pélope de festín a los dioses; Sísifo, fundador y rey de Corinto, obligado a cargar con una
Ceres, tocada por unas espigas como diosa de la Tierra, sostiene un cuerno repleto de frutos, símbolo de la abundancia y la fertilidad que la caracterizan. Recibe el homenaje de un grupo de campesinos, que entregan en ofrenda los productos que les otorga la tierra que cultivan. Esta diosa fue quien mostró a la humanidad la utilización del arado y la posibilidad de conseguir productos cultivados, a