Frente a las representaciones medievales de este pasaje bíblico (Daniel 13:1-64), que ilustran el momento en que Daniel denuncia el falso testimonio de unos ancianos que, tras haber sido rechazados por Susana, la habían acusado de adulterio, los pintores venecianos mostraron predilección por el momento inicial de la historia, aquel en el que Susana es espiada por los viejos mientras se baña. La ra
Cuadro identificado con el que, según Ridolfi, había pertenecido a Giovanni Battista Sanuto, posee una clara intención moral al mostrar los dos caminos que se ofrecen al hombre desde la niñez: el vicio y la virtud. El vicio adopta la apariencia de una cortesana veneciana: cabello rubio, escote generoso y abundantes joyas, mientras la virtud aparece coronada con laurel (su símbolo desde la Antigüed