El monarca francés está retratado a sus diecisiete años, en 1655. Viste de manera que se combinan en su atuendo el ropaje cortesano, y el militar en la coraza. La pintura ha sido reducida en tamaño. Estuvo firmada "Louis 14. Roy de France et de Navarre; Nocret Px. 1655", pues esta inscripción figura sobre un papel pegado por detrás del lienzo, debido a que al ser forrado éste, se perderían los dat
En la ladera de un monte y de izquierda a derecha, varias encinas sobe el declive de la montaña. En la lejanía, se vislumbra el perfil de una planicie desdibujada. Cielo salpicado por alguna nube desvaída (Texto extractado de: Gutiérrez Márquez, A.; Carlos de Haes en el Museo del Prado 1826-1898, Madrid: Museo Nacional del Prado, 2002, p. 314).
En la ladera verdosa de la montaña dos grandes peñascos y el inicio de otro a la derecha. Más al fondo otro declive montañoso y al fondo, entre nubes grisáceas, la mole azulada de la cordillera más elevada. Se trata del pico La Mayor, sobre el pueblo de Brez, también en la Liébana. La aguja del primer plano se encuentra sobre el pueblo de Lon (Texto extractado de: Gutiérrez Márquez, A.; Carlos de
En primer término, pradera desde la que se inicia un camino flanqueado a la derecha por matorrales y árboles y a la izquierda, por otro prado en cuya lejanía se observa una masa boscosa de la que sobresalen algunos árboles más latos, cuyas siluetas también se repiten, sobre un mismo esquema, en bastantes de sus estudios. Un cielo borrascoso, a base de pinceladas briosas y expresamente evidentes, c
En la orilla de una laguna bordeada de juncos y espadañas dos cazadores con sus escopetas, uno de pie y otro sentado, acechan cualquier movimiento en la laguna. A la izquierda, cierra la composición el tronco y parte del ramaje de un soberbio abedul y al fondo una masa de álamos que abren una perspectiva en profundidad. A la derecha, un cerro iluminado por el sol, subraya la tonalidad arcillosa y
A la izquierda, porción de campo que conforma el margen de la laguna en cuya orilla crecen juncos y vegetación de tipo lacustre. A la derecha, masa de agua en la que se refleja la frondosa alameda del fondo. Cielo muy movido, cubierto de nubes, sobre un soporte que deja ver la preparación subyacente (Gutiérrez Márquez, A., Carlos de Haes en el Museo del Prado 1826-1898, Madrid , 2002).
A la izquierda, una arboleda se refleja en las aguas remansadas de la laguna en cuyas orillas aparecen varadas dos barcas de remo. A la derecha, sobre la campa, se abre un sendero que se pierde en la lejanía donde reposan una bandada de patos delante de otra arboleda. Cielo borrascoso cubierto de nubes (Texto extractado de: Gutiérrez Márquez, A.; Carlos de Haes en el Museo del Prado 1826-1898, Mad
De izquierda a derecha, se abre un camino jalonado por restos de troncos talados que dan paso a una zona de vegetación en cuyo fondo y en una franja que casi ocupa toda la dimensión horizontal, crece un bosque de olivos. A la derecha, muy diluidos los perfiles de las montañas en la lejanía que se recortan sobre un amplio y despejado cielo. En el ángulo inferior derecho, primer plano de vegetación
De izquierda a derecha y marcando el ángulo superior derecho, arbustos que surgen de unos abruptos peñascos que, en estratos y marcados por una delimitada línea diagonal formada por la luz y la sombra, bajan hasta el ángulo inferior. En la parte superior y perfilándose sobre la claridad del cielo, ramaje de cuatro árboles sobre una estructura rocosa horizontal. A la izquierda, macizo horizontal re
Un mar embravecido bate las rocas de la orilla formando olas cuyas crestas espumosas avanzan hacia la orilla. Al fondo y a la izquierda, se divisan dos pequeñas embarcaciones de pescadores y sobre la línea del horizonte un cielo sereno (Texto extractado de: Gutiérrez Márquez, A.; Carlos de Haes en el Museo del Prado 1826-1898, Madrid: Museo Nacional del Prado, 2002, p. 126).
Por la izquierda, sobre la base blanca de la preparación que en parte queda al descubierto, se abre un camino en diagonal que se pierde en la lejanía en dirección a unos palmerales que se vislumbran, a lo lejos a la derecha. A la vera de este camino y remarcado por su sombra, el aljibe de una alquería o casa de campo de labranza, rodeada de palmeras, a la que se accede por unas escaleras. Cielo az
En primer término y entre piedras, el lecho de un arroyuelo que corre por la planicie. Al fondo, masa de arbolado entre la que despuntan tejados y edificaciones de alguna población y sobre ella, una gran masa montañosa cuyas cimas están semi cubiertas por brumas y masas nubosas (Texto extractado de: Gutiérrez Márquez, A.; Carlos de Haes en el Museo del Prado 1826-1898, Madrid: Museo Nacional del P
Picos de Europa. Cordillera Cantábrica. Sobre un terreno pedregoso, cuatro grandes robles cuyas ramas se entrelazan unas con otras. Al fondo picos de las altas montañas en cuyas cimas persisten algunos neveros (Texto extractado de: Gutiérrez Márquez, A.; Carlos de Haes en el Museo del Prado 1826-1898, Madrid: Museo Nacional del Prado, 2002, p. 98).
En primer término, estratos de rocas que asoman sobre la arena. Ya sobre el agua, más rocas en medio de la rompiente de las olas. En la lejanía, mar y línea del horizonte con un perfil de costa a la derecha. Haes retoma el motivo de estas mismas rocas, aunque ligeramente cambiado el punto de vista, en el dibujo (D5205) también de esta misma donación. También Jaime Morera recoge en su Playa de Guet
En primer plano y dejando al descubierto gran parte de la preparación del lienzo, grandes y enérgicas pinceladas que conforman el talud de la montaña sobre la que aparece el contorno de la cordillera en la que destaca, más cercana, la mole de un gran pico cuya cumbre se ve envuelta por las nubes bajas que asimismo cubren gran parte de las cimas del macizo lejano que se vislumbra a la derecha. El p
Delante de un fondo montañoso y sobre una gran masa de agua varios veleros y algunas barcazas están anclados en uno de los muelles del puerto. A la derecha y entre la bruma se vislumbra el humo y las chimeneas de un paisaje industrial (Texto extractado de: Gutiérrez Márquez, A.; Carlos de Haes en el Museo del Prado 1826-1898, Madrid: Museo Nacional del Prado, 2002, p. 254).
Al ser un estudio inacabado, queda visible en primer término, la imprimación del lienzo seguida de una masa boscosa indefinida en las laderas de las montañas. Al fondo, a la derecha, una mole montañosa con fuertes contrastes de luz y de sombra y más al fondo una cumbre más alta, difuminada por la lejanía y la bruma atmosférica. La cima que se divisa en la lejanía es Peña Casanzo sobre el valle de
Ícaro, hijo de Dédalo el constructor del laberinto del Minotauro, trató de huir con su padre de la isla de Creta con unas alas creadas por su padre que había pegado a la espalda con cera. Ovidio cuenta su historia en el libro VIII de las Metamorfosis (185-235): "(...) el muchacho empezó a recrearse en su atrevido vuelo, abandonó a su guía y, arrastrado por sus ansias de cielo, remontó el vuelo. La