El pintor neoclásico Antón Rafael Mengs permaneció en España alrededor de once años -desde 1761 hasta 1769, y desde 1774 a 1777- durante los que trabajó primordialmente para el rey Carlos III (1716-1788) en la decoración del Palacio Real de Madrid. Para el dormitorio del monarca realizó una serie de pinturas de caballete sobre la Pasión de Cristo, siendo la principal de ellas la gran tabla del Des
Este cuaderno, aunque se centra básicamente en la copia de obras romanas, dedica asimismo buena parte de sus hojas finales al esbozo de composiciones propias una vez instalado en Madrid. Un análisis de las obras reproducidas en este cuaderno demuestra lo variado de los intereses de Maella y de los artistas de su generación durante estas jornadas romanas. Que el cuaderno dé comienzo con una copia d
Concluido modellino del monumental lienzo conservado también en el Museo del Prado, considerado tradicionalmente como la obra maestra de José de Madrazo y la pintura más emblemática del neoclasicismo español, ya que supuso en su tiempo una gran novedad conceptual al ser, probablemente, el primer caso conocido en la pintura histórica decimonónica en que la interpretación de los grandes acontecimien
Isidro González Velázquez es uno de los ejemplos más elocuentes de los arquitectos formados en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando bajo las directrices de Juan de Villanueva (1739-1811), de quien fue discípulo predilecto y al que sirvió como delineante y ayudante en las obras del Real Sitio de Aranjuez. Pensionado en Roma entre 1791 y 1796, a su regreso a España continuó su colaboraci
La escena se desarrolla en una plaza porticada, de la que solo se representan dos lados, en los que se levantan cuatro plantas con balcones, los de la fachada principal enmarcados por pilastras y escudos, y un tejado en el que se abren buhardillas. En el centro se eleva el patíbulo, cubierto con un paño o alfombra adamascada, al que se encamina María Estuardo. La católica reina de Escocia se repre
Durante su segunda estancia en Roma (1758-1764) Castillo realiza los centenares de dibujos que forman los tres cuadernos del Museo del Prado, que constituyen el conjunto más numeroso de dibujos que se conservan de un pensionado español del siglo XVIII en Roma. Dibujados en un espacio de tiempo muy corto, comprendido entre el verano y el otoño de 1762, se deducen las fechas claramente de las página
Durante su segunda estancia en Roma (1758-1764) Castillo realiza los centenares de dibujos que forman los tres cuadernos del Museo del Prado, que constituyen el conjunto más numeroso de dibujos que se conservan de un pensionado español del siglo XVIII en Roma. Dibujados en un espacio de tiempo muy corto, comprendido entre el verano y el otoño de 1762, se deducen las fechas claramente de las página
Dibujo preparatorio para la composición de La disputa entre griegos y troyanos por el cuerpo de Patroclo, de la que se conserva un modellino (D06937) en el Museo del Prado. Siguiendo el más estricto método académico aprendido durante sus años juveniles de formación, José de Madrazo estudiaría individualmente cada una de las figuras que integran la composición, y que debían adoptar en el lienzo su
El corpus de la obra gráfica conocida de Pau Montaña se componía de sólo los dos dibujos originales conservados respectivamente en el Museu Nacional d´Art de Catalunya y en la Real Academia de San Fernando. De ahí la importancia de este conjunto, formado por 35 dibujos, todos ellos estudios o copias a partir de pinturas, frescos o dibujos de antiguos maestros que, en el momento de su realización,
Un detalle en la composición del dibujo del verso, como es el chal femenino con flecos y franja decorada a la griega, en el que se han recogido las rosas y otras flores cortadas del jardín, ayuda a precisar la fecha de esta obra en los últimos años de la vida de Paret, muerto en 1799. Este tipo de aderezo del atuendo de las damas se puso de moda en España con posterioridad a 1795, después de que e
Durante su segunda estancia en Roma (1758-1764) Castillo realiza los centenares de dibujos que forman los tres cuadernos del Museo del Prado, que constituyen el conjunto más numeroso de dibujos que se conservan de un pensionado español del siglo XVIII en Roma. Dibujados en un espacio de tiempo muy corto, comprendido entre el verano y el otoño de 1762, se deducen las fechas claramente de las página
El Cuaderno italiano de Goya difiere de otros cuadernos similares en la libertad creativa que revela su autor, quien, a pesar de mostrarse en las técnicas y en el estilo de los dibujos como un artista del siglo XVIII, es absolutamente personal en los avances formales y expresivos que ya anuncian los de sus años de madurez. Se aleja, en algunas páginas, de las pautas del cuaderno de apuntes de un j
Isidro González Velázquez es uno de los ejemplos más elocuentes de los arquitectos formados en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando bajo las directrices de Juan de Villanueva (1739-1811), de quien fue discípulo predilecto y al que sirvió como delineante y ayudante en las obras del Real Sitio de Aranjuez. Pensionado en Roma entre 1791 y 1796, a su regreso a España continuó su colaboraci
Aunque entre los dibujos de José de Madrazo abundan las escenas para composiciones mitológicas, el artista demostró siempre una predilección especial por la representación de las personificaciones de Amor a través de sus distintas fuentes clásicas. De hecho, una de las obras más bellas creadas por el artista, conservada en el Museo del Prado, representa al Amor divino y el Amor profano y a lo larg
La escena se desarrolla en un escenario arquitectónico con un altar a la derecha, el sarcófago abierto y la santa semiarrodillada en él. A la izquierda San Ildefonso de pontifical, tiende las manos para coger las tijeras que le tiende Recesvinto, en pie, detrás de la tumba.La atribución a Cajés, es perfectamente verosímil en razón del carácter, técnica y proporciones de los personajes, no es sin e
El dibujo presenta una figura infantil de pastorcillo sentada en un paisaje, que es iconográficamente específica de la representación del Buen Pastor. El Niño acaricia con la mano derecha una oveja, de perfil en primer término, y con la izquierda sostiene y se apoya en su cayado. La posición de las piernas, la derecha reposando con el pie en el suelo y la otra extendida sobre la roca en la que se
Dibujo situado en el reverso del D04166. Presenta dos escenas curiosas, de no muy fácil interpretación por lo sumario de las líneas y lo sutilísimo del trazo. En la parte superior, ante lo que parece un fondo de paisaje, hay varias figuras sentadas, y a la izquierda un pequeño grupo de unas cuatro o cinco figuras, que con los brazos en alto y con gracioso movimiento, están bailando. La escena infe