El general don Antonio Ricardos y Carrillo nació en Barbastro (Aragón) el 12 de septiembre de 1727. Se educó en Cádiz y a los catorce años entró en el ejército como capitán de caballería del Regimiento de Malta, del que su padre era coronel, combatiendo en Italia (1743-47) y Portugal (1762), en la defensa de Orán (1763) y en la expedición de Argel (1773). En 1764 fue destinado a Veracruz, para ref
Don José Rebolledo de Palafox y Melci, nacido en Zaragoza en 1775, era el tercer hijo de los marqueses de Lazán. Se educó en Madrid, ingresando en 1792 como cadete de la Guardia de Corps, a la que pertenecían ya sus dos hermanos mayores. Palafox alcanzó el grado de Segundo Teniente de este cuerpo en 1807. Al año siguiente, de guardia durante el motín de Aranjuez en que cayó Godoy, Palafox se unió
José de Urrutia y de las Casas, nacido en Zalla, Vizcaya, en 1739, fue el único militar en alcanzar el grado de Capitán General, por sus méritos, a pesar de su origen plebeyo. A los diecisiete años comenzó sus estudios militares en Barcelona, y aún como cadete, marchó a México en 1764 con el Regimiento de América, financiado por el duque de Osuna, lo que evidencia su temprana relación con esa impo
Entre 1777 y 1778 diversos ilustrados manifestaron su preocupación por la falta de grabadores que acometieran el proyecto de reproducir las pinturas que se conservaban en las colecciones españolas, fundamentalmente en los Palacios Reales, como medio para dar a conocer a nacionales y extranjeros la riqueza y el valor de nuestra pintura. Goya se hizo eco de esta idea y comenzó a grabar una serie de
Entre 1777 y 1778 diversos ilustrados manifestaron su preocupación por la falta de grabadores que acometieran el proyecto de reproducir las pinturas que se conservaban en las colecciones españolas, fundamentalmente en los Palacios Reales, como medio para dar a conocer a nacionales y extranjeros la riqueza y el valor de nuestra pintura. Goya se hizo eco de esta idea y comenzó a grabar una serie de
Entre 1777 y 1778 diversos ilustrados manifestaron su preocupación por la falta de grabadores que acometieran el proyecto de reproducir las pinturas que se conservaban en las colecciones españolas, fundamentalmente en los Palacios Reales, como medio para dar a conocer a nacionales y extranjeros la riqueza y el valor de nuestra pintura. Goya se hizo eco de esta idea y comenzó a grabar una serie de