Doble herma de Afrodita y Eros, que representa a las dos deidades del amor a través de prototipos famosos del siglo V a.C. Así, la cabeza de Afrodita pertenece al tipo olimpiada, que coronaba una figura sedente de la diosa. La obra completa era una magnifica imagen de culto, reflejo sin duda de las inolvidables esculturas y relieves del Partenón; sin embargo, hoy resulta aún imposible determinar s
La joven, vestida con un amplio peplo, por sus atributos se presenta como Fortuna, diosa del azar y del destino. En su brazo izquierdo lleva un gran cuerno de la abundancia, del que emergen uvas y granadas. Simboliza los dones de la diosa: abundancia y riqueza. Con sus estratos de asta reproducidos de forma naturalista, el cuerno recuerda al mítico de la cabra Amaltea, que las ninfas ofrecieron co
El águila y las armas pertenecían a un monumento funerario de época de Augusto (27 a. C.-14 d. C.). Fueron halladas en la villa de Valerio Messalla Corvino, conocido general y compañero de armas del emperador. Adornaban la parte superior de un pedestal con la urna cineraria del general inserta, dentro de su mausoleo. Hacia 1650, y por encargo del cardenal Girolamo Colonna, Orfeo Boselli añadió sob
Después de que a mediados del siglo IV a. C. fuera instalada en Cnido la estatua de Afrdita del escultor Praxíteles, el cual creó de esta manera la primera representación de un desnudo femenino de la escultura griega de gran tamaño, y por la gran fama que rápidamente alcanzó, también otros escultores hicieron suyo el tema. Esta obra pertenece a un tipo de Afrodita que recibió su nombre de una esta
Antinoo tuvo una breve existencia y dejó escasa huella en los textos antiguos. Nacido en Bitinia (Asia Menor) hacia 110 d.C., fue incorporado al séquito de Adriano (117-138) a los trece años de edad y en el permaneció hasta su muerte en el Nilo en el año 130. Adriano le divinizó, instituyendo culto a su persona y dedicándole algunos templos. Fruto de esta divinización, la imagen de Antínoo se difu
El Sátiro en reposo se contaba entre las más preciadas estatuad de la Antigüedad y de los tiempos modernos. La réplica que conserva el Museo probablemente fuera completada en el taller de Bernini para Cristina de Suecia, con un imponente tronco y la pierna en posición de otro tipo de sátiro. Aparee ante el espectador como un efebo inmaduro (sin vello púbico), a pesar de que no sólo en el siglo V a