El escenario de este cuadro ilustra a la perfección el concepto clásico de locus amoenus ("lugar placentero") que se desarrolló a partir de la época de Homero y que aludía a un lugar idílico donde llevar una existencia sensual, un lugar regado por un manantial que impregnara la tierra y protegido por la sombra de unos árboles. Sócrates describe un lugar así en el Fedro de Platón. El locus amoenus
Un grupo de personajes bailan al son de la flauta que toca un hombre subido a un roble y de los cascabeles que algunos bailarines se han colocado en las pantorrillas. La escena evoca las danzas que forman parte de la historia y los mitos de la antigua Grecia, y de la tradición que les dio continuidad -el libro Hypnerotomachia Poliphili incluye una descripción y una imagen de una danza similar. El
Este fragmento de tela junto con el detalle de la Cabeza del dios Baco (P1123) y un tercero que se conserva en Bogotá son los únicos restos de un gran lienzo que representaba la visita de Baco a los mortales y del que hay una copia en colección particular. El original, que estaba basado en un relieve helenístico que describe la visita de Dionisos a los hombres, probablemente se pintó como pareja d
En 1864, un año antes de que la epidemia de cólera segara la vida de Víctor Manzano a los treinta y cuatro años, éste pintó uno de los cuadros más tiernos de su esposa y sus hijos en el interior de su residencia en la madrileña calle del Progreso. De cuerpo entero, sentada en una butaca y ataviada con un vestido de raso gris aparece la imagen de Adela Pastor, hija de Luis María Pastor, reconocido
La historia de Ariadna y el dios tiene dos momentos fundamentales: uno es el encuentro entre ellos en la isla de Naxos después de que ésta fuera abandonada allí por Teseo, tema que representó Tiziano para Alfonso I de Este y que ceunta Ovidio en las Metamorfosis en el libro VIII (174-182): "(...) El hijo de Egeo raptó a la hija de Minos, largó velas rumbo a Día, y en aquella playa abandonó, cruel,
La obra es la más importante entre las que el artista realizó en Roma donde estuvo con pensión extraordinaria entre 1853 y 1858. El pintor la estudió con cuidado, según muestra el boceto preparatorio que se conserva en el Museo de Bellas Artes de Murcia. En él se manifiesta la dependencia del asunto respecto del motivo clásico de la Juventud o Hércules entre la Virtud y el Vicio, sustituyéndose la
A partir de este dibujo, es común que las inscripciones de B. den el número de catálogo de las piezas según el inventario del museo realizado entre 1849-57, es decir, pocos años antes del descubrimiento del propio Cuaderno de Ajello y de los comentarios del abate que lo acompañan. En dicho inventario aparece descrita la pieza 772 como “un Baco joven de mármol de carrara, muy restaurado, y al que f
Es el primero de los tres dibujos del Cuaderno de Ajello que representan, cada uno, dos hermas superpuestos. Todas las obras representadas se encuentran en el Prado, en el mismo estado en que las muestran los dibujos, y resulta muy problemático seguir la historia de cada una de ellas en los inventarios, porque su descripción resulta demasiado esquemática. Sin embargo, ha podido saberse que cinco d
Inspirada en el Dioniso Sardanápalos de Praxíteles (h. 340 a.C.), en la que se desea recuperar la imagen más antigua del dios. Frente al Baco joven e imberbe que dominaba en el arte griego desde el siglo IV a.C., el autor de la presente obra prefiere los modelos arcaicos y del siglo V a.C., en los que el dios aparece barbado y digno, revestido, en las figuras de cuerpo entero, por una larga túnica
Ha figurado también como: Dioniso como señor del tíaso. En el plinto de esta escultura, como en el de varios hermas conservados en el Prado y en la Casa del Labrador de Aranjuez, se lee una inscripción latina que sitúa su hallazgo en la Villa de los Pisones en Tivoli, lo fecha en 1779, y recuerda que su descubridor y restaurador fue el diplomático aragonés José Nicolás de Azara.El lugar de origen
Copia romana (h. 150 d.C.) de un original del helenismo tardío (h. 125-100 a.C.). Adquirido por Velázquez en Italia. Dioniso, de cuya naturaleza multiforme y vida aventurera en la tierra dan testimonio innumerables mitos y las más diversas representaciones, fue a menudo caracterizado desde el siglo IV a.C. como un dios eternamente joven y a la edad de un efebo. La estatua lo presenta con un cuerpo
Las figuras pertenecen a un repertorio artístico que en el curso del siglo II a. C. fue desarrollado sobre todo en talleres áticos. Representa el cortejo de Dioniso, los sátiros y ménades que deleitan al dios con música y baile. Dichas representaciones del tíaso dionisiaco son, en gran parte, deudoras del arte helenístico.Este relieve procede de una crátera marmórea, cuya pared estaba rodeada por
Ha figurado también como: Bailando para Dioniso. Las figuras pertenecen a un repertorio artístico que en el curso del siglo II a. C. fue desarrollado sobre todo en talleres áticos.Representa el cortejo de Dioniso, los sátiros y ménades que deleitan al dios con música y baile. Dichas representaciones del tíaso dionisiaco son, en gran parte, deudoras del arte helenístico. El relieve, de sobresalient
Dioniso, que fue representado normalmente con cuerpo blando y turgente como símbolo de riqueza, fertilidad y vida disipada, aparece en esta estatua como un joven más bien musculoso. Aunque esta manera de representarlo es bastante singular, si puede explicar la afición de los romanos cultos a la estatuaria clásica y su placer por contemplar obras maestras griegas transformadas en otros personajes d
Esta cabeza tardohelenística se dispone sobre un busto con piel de tigre que la transforma en la de un joven Dioniso. Representa a un muchacho en actitud contemplativa, con la cabeza girada hacia la derecha y ligeramente inclinada hacia abajo. Su cabellera está ceñida por una corona de hiedra con dos grandes frutos (corimbos) encima de la frente. Los once orificios paralelos al zarcillo demuestran
El herma doble con corte semicircular del cuello y compuesto por dos cabezas idénticas que sólo difieren ligeramente una de otra en las medidas estaba montado originalmente sobre un pilar hoy perdido. Los hermas de dioses bifrontes son relativamente tardíos, pues probablemente fueran creados por primera vez en el siglo I a.C. para los propietarios de villas romanas, que estarían bien familiarizado
Esta cabeza de cabra, procedente de la colección del marqués de Carpio (1629-1687), es un fragmento de una escultura en la que, según una representación frecuente en la Antigüedad, un pequeño jinete -que podría ser Baco, Cupido o Venus- cabalgaría sobre el animal. La cabeza de la cabra, montada excesivamente erguida sobre el pedestal actual, procede de una estatua de un tamaño próximo al natural,
Tres hermas en miniatura, que representan a Dioniso joven, Dioniso con barba y Afrodita, procedentes del larario de una casa pompeyana.Casi todas las hermas del Prado, con sus bustos de divinidades y con los retratos de griegos famosos tienen un tamaño cercano al natural. Sin embargo, además de estos hermas, existen en el Prado y en la mayoría de los demás museos de Europa un sinnúmero de hermas e