Esta medalla, que se acuñó en tres materiales -oro, plata y bronce-, según las categorías habituales de las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes, es la que se entregó como premio en 1915, y es un trabajo conjunto de dos grandes escultores, Blay y Benlliure. El rey Alfonso XIII, según la prensa de la época, les agradeció su calidad en un escrito al director general de Bellas Artes. En el anverso