De octubre de 2019 a junio de 2020
Esta actividad, dirigida a grupos de personas con TEA y al colectivo de migrantes está especialmente diseñada para personas que tienen una importante barrera para la comunicación oral. La anticipación, la repetición, el uso de apoyos visuales y el hecho de abordar una temática cotidiana -como es en este caso la vinculada a la comida- contribuyen a esta adecuación.
La actividad se realiza en dos sesiones durante dos días de una misma semana. La primera tiene lugar en la sede del grupo participante y la segunda en el Museo, permitiendo una aproximación paulatina a los retos espaciales, humanos y conceptuales que conlleva la visita al Museo.
El trabajar con elementos cotidianos y reconocibles como los alimentos y los utensilios relacionados con la comida facilita la experiencia en la percepción y comprensión de las obras de arte, permitiendo trazar conexiones lingüísticas y mentales entre los objetos conocidos y los representados. La actividad finaliza con un taller de collage en el que todos esos objetos propios de un bodegón pueden ser reordenados en nuevas versiones personales, poniendo en juego las capacidades creativas en un ambiente relajado y de libertad.