Vino de Cuba. Lo mandaron con un cuadro que me dieron para restaurar. Y cuando había terminado la restauración, le doy la vuelta y oigo: “¡Pam!”. Y me dije: “¿Qué pasa aquí?”. Al abrirlo, había un hueco por el que salían cajas. Dentro de las cajas, lo primero que encontré fue una dentadura de oro, también unos pendientes, unas sortijas… Había cantidad de objetos, de alhajas, muchas de las cuales tenían puesto el precio. Y lo entregué todo a Sotomayor.
Entra a trabajar en el Museo como carpintero y después de un breve periodo como vigilante de sala, se incorpora al taller de restauración realizando labores de carpintería, que era su especialidad. Su padre también trabajó en el Museo Nacional del Prado, y participó en la evacuación de las obras durante la Guerra Civil española.
Entrevista realizada el 11 de febrero de 2015