La obra invitada: La Virgen con el Niño y ángeles, Jean Fouquet
Museo Nacional del Prado. Madrid 12/02/2014 - 25/05/2014
Etienne Chevalier, tesorero de los reyes de Francia Carlos VII y Luis XI, encargó a Jean Fouquet un díptico que permaneció en la iglesia colegial de Nôtre Dame de Melun hasta que a finales del siglo XVIII fue dividido. El panel izquierdo, perteneciente a la Gemäldegalerie de Berlín, muestra a Etienne Chevalier arrodillado, acompañado por su santo patrón san Esteban, mientras que el panel derecho, propiedad del Real Museo de Bellas Artes de Amberes, representa a la Virgen de una manera sorprendentemente original en el contexto de la pintura francesa de la época.
En esta tabla de La Virgen con el Niño y ángeles, verdadera obra maestra del siglo XV, Jean Fouquet evidencia la forma singular con que tradujo en imágenes las distintas influencias que contribuyeron a la gestación de su arte. Si la iconografía y, en particular, los ángeles monocromos rojos y azules están en deuda con la tradición nórdica, el modo en que resuelve la composición y la materializa evidencian su conocimiento del arte flamenco y del Quattrocento italiano. La forma de traducir las diferentes materias y los efectos de luz como el reflejo de la ventana sobre la superficie pulida de las dos bolas del trono remiten a Jan van Eyck. La construcción geométrica del espacio y su gusto por las formas puras, como la cabeza oval de la Virgen o sus senos trazados como con compás, evocan las obras de Paolo Ucello y de Piero della Francesca.