(activo a principios del siglo XX). El Museo del Prado conserva un lienzo de este artista, titulado El espejo (paisaje), que ingresó en la colección procedente del antiguo Museo de Arte Moderno y que posteriormente fue depositado en el Ministerio de Hacienda. La obra, fechada en 1923, sigue los pasos del impresionismo a la manera de Darío de Regoyos, maestro que estudió en profundidad los efectos de la luz.