La Virgen y el Niño con ángeles músicos
Siglo XVI. Óleo sobre tabla, 121 x 87 cm. No expuestoLa obra sigue el estilo del maestro de la Santa Sangre, anónimo de Brujas, discípulo de Quintín Massys y llamado así por el retablo de la capilla de la Santa Sangre, en la misma ciudad, hacia 1520. El autor ha representado junto a la Virgen con el Niño dos ángeles músicos que tocan un laúd y un arpa diatónica, instrumentos que han sido descritos con sumo detalle. El ángel de la derecha aparece con un arpa modelo gótico, un instrumento de caja plana, con oídos en forma de "C", columna curvada y clavijero elevado en el extremo. Se distinguen veintiuna clavijas y la posición de las cuerdas es la correcta así como la de las manos. El arpa está apoyada al centro del pecho; con la mano derecha tañe las cuerdas agudas y con la izquierda se acompaña en las graves, tocando con los dedos pulgar e índice de cada mano. En el caso del ángel de la izquierda, con laúd, el instrumento ha sido representado minuciosamente, tiene seis clavijas visibles en el lateral y seis órdenes dobles de cuerdas. El diapasón y el clavijero son de madera rojiza, con algunos trastes poco visibles, estando el clavijero inclinado hacia atrás. Presenta una rosa labrada en la que se distinguen figuras geométricas, y un puente rematado en los bordes. En el detalle del puente se ha descrito incluso el final de las cuerdas atadas (Texto extractado del Proyecto Iconografía Musical, U.C.M.)