María Josefa de la Soledad Alonso-Pimentel y Téllez-Girón, condesa-duquesa de Benavente, duquesa de Osuna
Hacia 1785.Sala 062
María Josefa de la Soledad Alonso-Pimentel y Téllez-Girón, condesa-duquesa de Benavente, nació en Madrid el 28 de noviembre de 1752, hija única de Francisco de Borja Alfonso Pimentel Vigil de Quiñones, conde-duque de Benavente, y de María Faustina Téllez-Girón, hija del VII duque de Osuna. Descendiente directa de la nobilísima casa de Pimentel, heredó las de López de Zúñiga y Ponce de León con los ducados de Béjar, Arcos, Mandas, Plasencia y Gandía; fue princesa de Anglona y de Squillace, marquesa de Lombay y Jabalquinto, condesa de Mayorga y, por su matrimonio, en 1771, con su primo Pedro Alcántara Téllez-Girón y Pacheco (1755-1807), el ducado de Osuna. Por su talento y su gusto, sus salones eran de los más animados de la aristocracia madrileña. Protegió a escritores y a numerosos artistas, de los cuales el de mayor fama fue Francisco de Goya. En 1786 fue nombrada presidenta de la Sección Femenina de la Sociedad Económica Matritense. Destacó por su patriotismo en la guerra de la Independencia y residió en Cádiz mientras duró la contienda. Murió en Madrid el 5 de octubre de 1834. Los rasgos de la retratada, concretamente la característica forma de la nariz, recuerdan el retrato pintado hacia 1785, posiblemente por Agustín Esteve y Marqués, de la condesa-duquesa de Benavente. En esta miniatura aparece representada sin aderezos, tan solo con una toca de cabos sobre los hombros, lo que acentúa el carácter íntimo del retrato (Texto extractado de Espinosa, Carmen: Las miniaturas en el Museo Nacional del Prado. Catálogo razonado, Madrid, Museo del Prado, 2011).