Sarcófago con la historia de Aquiles y Políxena
Hacia 250. Mármol de Afyon-Docimium, 82 x 88 cmSala 072
Mitad derecha del frontal de un sacófago, fragmentado e incompleto, que forma un conjunto con los relieves E00118, E00180 y E00182. Posiblemente fue hallado a finales del siglo XVII o principios del XVIII en algún lugar del golfo de Nápoles y se procedió entonces a dividirlo en partes para facilitar su venta y su traslado. Aparte de los sectores presentes, adquiridos por Felipe V (a la Casa de Alba), se conserva un pequeño fragmento, con una escena de la guerra de Troya, en el Museo del Louvre.
En la escena frontal -que presenta varias cabezas restauradas- se ve el sacrificio que, sellando la paz entre aqueos y troyanos, ha de permitir la celebración de las bodas de Aquiles y Políxena, hija del rey Príamo. A la izquierda, varios guerreros aqueos siguen a Ulises -reconocible por su gorro cónico o pileus-, quien lleva una pequeña ternera a Agamenón. Éste, en el centro, cumple la función sacerdotal de un rey o jefe de ejercito, y a él se acercan también, por la derecha, varios troyanos con gorros frigios y mangas largas. Las bodas, sin embargo, se tornarán en tragedia: Paris, haciendo caso omiso de los pactos, herirá de muerte a Aquiles en el talón -representado en la escena del costado lateral derecho- y los aqueos, furiosos por la muerte de su héroe, tomaran venganza -escena de costado izquierdo-, Neoptolemo, hijo de Aquiles, se encargará de conducir a la infortunada Políxena para sacrificarla en honor del difunto. No hay duda de que historia tan funesta parece, a priori, un motivo excesivamente dramático para una decoración funeraria. Acaso por ello es este sarcófago el único de los conocidos hasta hoy que la representa y la fecha de su realización, en plena anarquía militar, puede explicar su amargura pesimista.
Museo Nacional del Prado, Escultura clásica: guía, Santander, Fundación Marcelino Botín; Museo del Prado, 1999, p.126