Copa de ágata rematada por un busto
1590 - 1630. Ágata, Esmalte, Oro.Sala 079B
Vaso compuesto por piezas de ágata de distintas vetas, algunas quizás antiguas, unidas por guarniciones de diseño desigual, realizadas en oro esmaltado. El cuerpo es semiesférico y se une a la tapa mediante una guarnición de dos bandas decoradas, la primera con motivos menudos, esmaltados de blanco y verde, y la segunda con ovas en esmalte rojo translúcido, simulando cabujones de rubíes, entre cartones blancos y florecillas azules, enmarcado todo por cenefa de hojuelas blancas esmaltadas de negro. En el remate, una guarnición similar sostiene un busto de un personaje que lleva collar esmaltado, vestido azul de trasflor (translúcido) sobrepuestos vegetales blancos con dos mascarones en los hombros. El vástago, sujeto por guarnición de falsos cabujones, es de tonalidad más oscura, y se une al pie acampanado, desprovisto del ruedo de asiento, con dos guarniciones menores y un corto cuello de ágata.
En relación con el remate en forma de busto de la obra del Prado, en la Schatzkammer der Residenz de Munich se conserva una copa de calcedonia con bichas aladas, en oro esmaltado, rematada por un busto con armadura de oro esmaltado y la piel de un león, inv. 377. La cabeza, como en el vaso del Prado, es de ágata, y el diferente color del bandeado sirve para destacar el tocado. La mezcla de diferentes materiales para dotar de volumen y colorido una piedra tallada de bulto redondo o en camafeo, preferentemente con motivos antropomorfos, es labor en la que destacó Ottavio Miseroni, al que se atribuyen buena parte de este tipo de trabajos con piedras de diferentes colores.
La guarnición, con el empleo del esmalte rojo translúcido para imitar cabujones de rubíes y las florecillas azules presenta variantes, como señala Arbeteta sobre los habituales diseños derivados del estilo cosses de pois o "vaina de guisantes" y las hojas lobuladas, con su centro algo relevado, decoradas con los dibujitos menudos de esmalte negro recogidos en los diseños de los L’Egaré, Gedeón y Gilles. Sin embargo, las hojuelas de los bordes relacionan el vaso con otros del Prado, como los O10 y O11 y otros, atribuidos, en lo que a las guarniciones se refiere, a la escuela de París. El aspecto que le da la veta rojiza al cuerpo hizo que este vaso fuese especialmente valorado. El vaso podría ser de Idar-Oberstein (Arbeteta, L., "Otras miradas sobre el Tesoro del Delfín: revisión y nuevas propuestas de procedencias y autorías" en Boletín del Museo del Prado, 37, 55-57, 2019-21, 2021, p. 40).
Puede verse el estado de la obra en el siglo XIX a través de la fotografía de Juan Laurent y Minier, "Vase agate calcédoine, montures d’or et émail, XVIe siècle, règne de Henri II", hacia 1879, Museo del Prado, HF0835/23.
El Tesoro del Delfín es un conjunto de vasos preciosos que, procedentes de la riquísima colección de Luis, gran Delfín de Francia, vinieron a España como herencia de su hijo Felipe V, primer rey de la rama borbónica española. Luis de Francia (1661-1711), hijo de Luis XIV y María Teresa de Austria, comenzó su colección tempranamente influenciado por su padre; la adquisición de obras se producía por diversas vías, desde regalos hasta su compra en subastas y almonedas. Al morir el Delfín, Felipe V recibe en herencia un conjunto de vasos con sus respectivos estuches, que fueron enviados a España. En 1716 estaban en el Alcázar de Madrid, guardados en sus cajas, desde donde se trasladaron, en fecha posterior, a La Granja de San Ildefonso, lugar donde se citan a la muerte de Felipe V, conservados en la llamada Casa de las Alhajas. En 1778 se depositaron, por real orden de Carlos III, en el Real Gabinete de Historia Natural y continuaron en la institución hasta el saqueo de las tropas francesas en 1813. La devolución de las piezas se produjo dos años más tarde y con algunas pérdidas. Fue en 1839 cuando la colección llega al Real Museo, donde sufrió en 1918 un robo. Con ocasión de la Guerra Civil española fueron enviadas a Suiza regresando en 1939, con la pérdida de un vaso, desde entonces se encuentran expuestas en el edificio Villanueva.