El derecho de asilo
1892. Óleo sobre lienzo, 340 x 540 cm. No expuestoLa expresividad declamatoria de los personajes es llevada al extremo por Amérigo en este cuadro, con el que consiguió el máximo galardón en la Exposición de 1892, y que representa un episodio medieval en el que un fugitivo de la justicia civil se acoge al fuero eclesiástico del derecho de asilo en suelo sagrado, al amparo de los privilegios de jurisdicción propia de la Iglesia durante el Antiguo Régimen. Entre los personajes representados de este acogimiento sagrado, un preso a las puertas de un convento de frailes, perseguido por sus guardianes, a quienes suplica su desesperada esposa, con su hijo de pocos meses en brazos. Resuelta la composición por el artista con un indudable efectismo dramático, la escena se desarrolla en un paraje nevado, extremando el pintor su intención realista al detalle de dejar su firma "esculpida" en uno de los sillares del templo, semioculta por la nieve acumulada junto a la puerta (Texto extractado de Díez, J. L., Maestros de la pintura valenciana del siglo XIX en el Museo del Prado, Museo Nacional del Prado, 1997, p. 66).