Jarrito de cristal con niños y sierpes
1550 - 1575. Cristal de roca / cuarzo hialino, Esmalte, Oro, Plata dorada, Rubí, 14 x 9 cmSala 079B
Vaso pareja del O76 compuesto por tres piezas de cristal de roca y dos guarniciones de plata dorada y parcialmente esmaltada, ambos similares al O74. El cuerpo tiene forma globular y está formado por dos piezas ensambladas mediante una moldura, lisa la superior y con bajorrelieve de gallones helicoidales y dardos en la inferior, uniéndose al pie redondo. Se completa con dos guarniciones superiores, que forman cuello y tapa en plata esmaltada con diseño de lacerías en el que está embutido esmalte azul opaco. Remata un ramillete de flores en oro esmaltado con un rubí, piedra que también aparece en los sobrepuestos de cartelas. El pico está formado por un niño sentado, realizado en bulto redondo, que sostiene en alto una caracola, mientras que el asa arranca de otro niño sentado, que sujeta dos serpientes enroscadas.
Constituye un ejemplo de la estética de la llamada “Escuela de Fontainebleau”. Forma parte de un conjunto de vasos que Alcouffe considera franceses, tanto en la talla como en sus monturas, datables todos en el tercer cuarto del siglo XVI, que siguen modelos de los vasos ideados por el parmesano Enea Vico, publicados en 1543. Presentes en diferentes colecciones europeas, aparecen realizados con características semejantes. Son piezas labradas en cristal de roca, con monturas muy similares: los cristales presentan gruesas paredes, con diseños de gallones helicoidales y dardos; las monturas, tanto en oro como plata, se adornan con la presencia de figuras infantiles en bulto redondo, serpientes anudadas, caracolas, águilas y delfines, elementos que, decorados parciamente con esmaltes, son de uso común a todos ellos. En cuanto a los arabescos de la montura, están inspirados, al igual que la guarnición del pie del vaso O74, en modelos de lacerías publicados por Sylvius en 1554, que pueden relacionarse con las variaciones de Etienne Delaune, publicadas hacia 1575.
El Tesoro del Delfín es un conjunto de vasos preciosos que, procedentes de la riquísima colección de Luis, gran Delfín de Francia, vinieron a España como herencia de su hijo Felipe V, primer rey de la rama borbónica española. Luis de Francia (1661-1711), hijo de Luis XIV y María Teresa de Austria, comenzó su colección tempranamente influenciado por su padre; la adquisición de obras se producía por diversas vías, desde regalos hasta su compra en subastas y almonedas. Al morir el Delfín, Felipe V (1683-1746) recibe en herencia un conjunto de vasos con sus respectivos estuches, que fueron enviados a España. En 1716 estaban en el Alcázar de Madrid, guardados en sus cajas, desde donde se trasladaron, en fecha posterior, a La Granja de San Ildefonso, lugar donde se citan a la muerte de Felipe V, conservados en la llamada Casa de las Alhajas. En 1778 se depositaron, por real orden de Carlos III, en el Real Gabinete de Historia Natural y continuaron en la institución hasta el saqueo de las tropas francesas en 1813. La devolución de las piezas se produjo dos años más tarde y con algunas pérdidas. Fue en 1839 cuando la colección llega al Real Museo, donde sufrió en 1918 un robo. Con ocasión de la Guerra Civil española fueron enviadas a Suiza regresando en 1939, con la pérdida de un vaso, desde entonces se encuentran expuestas en el edificio Villanueva.