Soldados saqueando una ciudad
Segunda mitad del siglo XVI. Aguada agrisada, Pluma, Preparado a lápiz, Tinta parda sobre papel, 176 x 230 mmNo expuesto
La actual y convincente atribución al pintor manierista romano Giovanni de´ Vecchi, antiguo seguidor de los Zuccaro se debe a Florian Härb (2003). La insólita composición, con una gran cantidad de figuras amontonadas en un espacio pictórico de opresiva estrechez, es acorde con las excéntricas invenciones de De´ Vecchi. La imaginación florida del artista está representada en el elaborado carruaje del centro de la composición, absurdamente decorado con ménsulas y cariátides. Dos soldados arrastran este ridículo carro, cuyas ruedas presentan el distorsionado aspecto de ovaladas para dar la sensación de velocidad, cargado con dos hombres y una mujer prisioneros, y con un montón de objetos producto del saqueo.
El dibujo presenta muchas de las peculiaridades de De´ Vecchi, como los pequeños rostros en forma de torta de las figuras, algunos de ellos con expresiones de permanente sorpresa. Otra característica de su estilo es el empleo de diferentes sombras de aguada parda para marcar el primer término y el fondo. Este recurso gráfico, así como el de las caras de torta, se encuentra en otros dibujos del artista, como en el magnífico Juicio Final (Nueva York y Londres, 2004, núm. 8). En el dibujo del Prado se emplea una tinta parda ligeramente rojiza, más rica e intensa, para los soldados y los desconcertados ciudadanos de la derecha del primer término, mientras el resto es gris parduzca, de menor intensidad. En varias ocasiones, De´ Vecchi animó sus dibujos con aguadas de color púrpura, rosa y amarillo (Texto extractado de Turner, N.: Dibujos italianos del siglo XVI, Museo Nacional del Prado, 2004, p. 124).