La Asunción y Coronación de la Virgen
Hacia 1497. Óleo sobre tabla, 150 x 81 cmNo expuesto
Reproduce un tipo iconográfico similar a la tabla del tríptico Heinemann del Maestro de Budapest. Como en ella, se funden la subida de la Virgen al cielo y su coronación por dos ángeles en presencia de Dios Padre y la Inmaculada descendiendo a tierra. La inclusión de la figura de Dios Padre distingue esta obra tanto de la tabla del Maestro de Budapest como del retablo de Frómista. Su figura se aparta de otras versiones de este tema con la representación del Padre, ya que en lugar de bendecir, levanta su mano derecha y dirige sus palabras hacia María, escritas en una filacteria. Características de esta tabla es el que María lleve una diadema ciñendo sus cabellos y el collar de doce perlas en su cuello. Esto, junto con la riqueza de su traje, la acerca a la descripción de Santa Brígida: fui llevada al cielo con infinita honra y gozo, los vestidos con que fui enterrada quedaron en este sepulcro y fui vestida con vestiduras como las que tiene vestidas mi Hijo y Señor mio Jesucristo. El ligero giro, que Diego de la Cruz imprime a su cuerpo hacia la derecha, rompe la estricta simetría de algunas de las versiones de este tema, favorecida por la distribución de los ángeles a ambos lados, en este caso ocho en total (Texto extractado de Silva Maroto, María Pilar: Pintura hispanoflamenca castellana: Burgos y Palencia. Obras en tabla y sarga. II, 1990).