La Era Cristiana
1871. Óleo sobre lienzo, 290 x 410 cmDepósito en otra institución
"Está representada por una joven modesta y sencilla que trae el libro de los Evangelios y en ademán de predicar la nueva doctrina. Detrás de ella viene la Fé cubierta con un manto blanco sostenido y adelantando á una joven contrita. Al lado de la Fé está la Caridad, jóven robusta, con un niño de pecho en los brazos y otro más crecido de la mano que se cubre con su manto sirviendo de guia á un pobre anciano que se apoya en su hombro. A la izquierda de la Caridad está la Esperanza que solicita consuelo á una pobre andrajosa, prometiéndole en el otro mundo la recompensa de los trabajos y miserias de este.
Dos figuras, la de un magnate y la de un plebeyo abrazándose representan la Fraternidad. Detrás de la Fé se ve á una madre o una viuda que ha perdido alguna persona querida y que goza del consuelo que recibe de la Religión. Dos jóvenes esposos representan la santidad del matrimonio; la jóven está rebosando de gozo al verse elevada á compañera de esclava que antes era de hombre; un negro expresa la alegría y gratitud que le inspira una Religión que le considera igual á los demás hombres. En un campo, sobre una colina, se descubre á un hombre labrando la tierra para manifestar que la nueva Religion ennoblece el trabajo.
En el centro del cuadro el jóven que está con una rodilla en tierra representa a un esclavo que se acoje con gozo á la nueva doctrina sintiendo germinar en su pecho los sentimientos nobles y generosos que ella inspira. El Emperador que está detrás y que mira ceñudo á la Nueva Era en actitud de oponerse á ella, representa la Soberbia. La matrona que está á su lado , la Envidia; á la izquierda de ésta hay un jóven patricio que acude á la voz de la Religion desoyendo la de su compañera que se esfuerza en detenerle. En el primer término una doncella, que se entretenía en hacer guirnaldas de flores, vuelve la cabeza, iluminada por la Religion, y escucha con admiración e interés las palabras de la Nueva Era, mientras que un personaje, en cuyo semblante se ve pintado el vicio intenta seducirla ofreciéndole joyas que ella rehusa; ese personaje representa la Lujuria; detrás de él, en segundo término, un avaro huye de la Religion, cerrando los oidos á la suplicante voz de una muchacha pobre que le pide limosna; más lejos se ve sentada en el suelo á otra pobre mujer de rostro demacrado, cuyo hijo le señala la Nueva Era, invitándola á ir hacia ella como presintiendo los beneficios que de la misma deben prometerse.
Más lejos en un camino llano se descubre, recostada muellemente en un carro lujoso tirado por dos caballos, á una matrona, rodeada de esclavas que procuran proporcionarle toda clase de goces materiales; representa la Pereza. Dos estoicos parecen mirar con desprecio el lujo que ostenta esa matrona. Sobre una altura, bajo una columnata, se descubren varios grupos de personas, las más entregándose á la orjía, representan la Gula, mientras que otras, ya hartas, se recrean con el espectáculo de una lucha de atletas, animándoles con sus gestos y sus dones; estos combatientes representan la Ira. Más lejos, debajo de un grupo de árboles, se representa una bacanal alrededor de la estatua del Dios Baco. En el fondo se descubre un circo donde tantos cristianos habían de morir. En el cielo, que está nublado aparece el arco iris símbolo de la paz, y del lado de donde viene la Era Cristiana las nubes se disipan y empieza á descubrirse el Cielo". (Cat. ENBA) (Texto extractado de Pintura del Siglo XIX en el Museo del Prado. Catálogo General, Madrid: Museo Nacional del Prado, 2015, p.163).