Visita de Carlos V a Francisco I en la Torre de los Lujanes
Hacia 1860. Pluma, Tinta parda sobre papel amarillento, 135 x 194 mmNo expuesto
Siguiente paso a un dibujo conservado en el Museo Nacional de Arte de Cataluña (número de inventario: 7219), en el que Rosales invierte la composición, concretando ya la disposición escénica definitiva, que plasmará en el boceto pintado sobre este episodio histórico. Así el enfermo Francisco I, incorporado en su lecho ayudado por su médico, está situado en el extremo derecho de la estancia. Ante él, un caballero de espaldas y sombreado en zigzag, se inclina haciendo una reverencia para anunciarle la presencia del emperador Carlos, que se aproxima al lecho de su prisionero por la izquierda, acompañado de su cortejo. A pesar de su factura rapidísima y abreviada, de trazo nervioso y enérgico, Rosales define con destreza la ambientación espacial de la estancia, así como las zonas de iluminación, sugiriendo con gran instinto la estrechez del aposento y la penumbra angosta en que se desenvuelven las figuras. El papel está sellado con dos estampillas romanas, iguales a las que aparecen en otro dibujo de esta misma escena. Rosales estudiaría aisladamente el grupo del emperador y su séquito en un apunte parcial (Museo del Prado, D05134) (Díez, J. L., Eduardo Rosales [1836-1873:] Dibujos. Catálogo razonado, Santander, 2007, p. 269).