Fray Tomás Gascó
Hacia 1794. Óleo sobre lienzo, 64 x 44 cm. No expuestoRepresentado de busto largo, viste el hábito mercedario. De rostro anciano y nariz aguileña, la inexpresividad de sus rasgos evidencia su naturaleza de retrato póstumo, copiado de otro retrato del fraile o más probablemente, de una máscara mortuoria, ratificando la fidelidad de sus facciones la inscripción que el lienzo conserva en el dorso, que lo califica como verdadero retrato.
Fray Tomás Gascó nació en Foyos, población situada entre Valencia y El Puig, ordenándose el 13 de agosto de 1730. Amigo y protector del pintor José Vergara, a quien encargó la decoración del claustro del Monasterio del Puig, falleció el 10 de marzo de 1785. El letrero que el cuadro lleva al dorso completa la biografía del venerable fraile, mencionándose en él sus dos estancias en Argel, donde viajó para rescatar cautivos, y la reedificación del convento de la Merced en Valencia con su propio capital.
Este retrato es uno de los pocos testimonios que posee el Prado de la actividad retratística de Vicente López durante su etapa valenciana, y probablemente fuera encargado al pintor a la vez que otras efigies póstumas de venerables mercedarios, conocidas de su mano, como la de Fray Agustín de Arques Jover, hoy desaparecida (Texto extractado de Díez, J. L.: Maestros de la pintura valenciana del siglo XIX en el Museo del Prado, Museo del Prado, 1997, p. 96).