Retrato de dama
Primera mitad del siglo XIX. , 43 x 52 mmSala 062
Este delicado retrato femenino es una miniatura ( 43 x 52 mm) pintada con gran finura que presenta a una joven adolescente. Es un ejemplo más de cómo Esquivel pintó ampliamente el universo femenino en soportes de diverso tamaño y, en ocasiones como esta, en miniaturas de carácter íntimo, concentrándose en la plasmación del rostro, reflejando la moda de fino talle y amplio escote sobre un fondo oscuro que resalta más la silueta, trasmitiendo un aire de suave naturalidad. La miniatura está elaborada con una técnica puntillista en las carnaciones y con suaves tonos en su gama cromática. Tal como indica la especialista Carmen Espinosa (2011), Esquivel inició su etapa como pintor de miniaturas en los años veinte y la culminó en la década de los treinta. Su dedicación a la miniatura se debe a su maestro Francisco Gutiérrez, quien la practicó con asiduidad. Sus mejores obras de este género están fechadas entre 1833 y 1839. Esta obra recuerda bastante a las pintadas por el miniaturista Florentino Decraene por esos años. Tras sufrir una enfermedad en 1839, Esquivel no volvió a pintar en este género. La obra se encuentra en un buen estado de conservación. Conserva el cristal original y lleva un marco de metal sobredorado.
Azcue Brea, Leticia, Antonio Maria Esquivel. 'Retrato de dama' En: Memoria de actividades 2011, Madrid, Museo Nacional del Prado, 2012, p.58-59