En el estudio
Hacia 1885. Óleo sobre lienzo, 73 x 110 cmDepósito en otra institución
Joaquín María Herrer y Rodríguez cultivó la pintura de historia y los temas religiosos de carácter costumbrista con escenas de interiores de conventos e iglesias. En sus obras acierta a representar con intimismo poético el ambiente de la vida cotidiana.
Género típicamente decimonónico, la pintura de interior y de factura preciosista sería puesta de moda en nuestro país por Fortuny. Se trata de una temática ampliamente ilustrada por gran número de maestros de la pasada centuria. La mujer suele protagonizar la obra en la intimidad de un confortable y lujoso salón burgués, y su presencia en el taller de un artista es tema también muy habitual en la pintura de la época.
En este lienzo de Herrer se describen, con el característico virtuosismo de esta clase de obras, los detalles del mobiliario, la alfombra de rico dibujo, tibores, la paleta del pintor, una cabeza de un niño en escayola y varios cuadros, entre ellos, las copias del retrato de Beatrice, condesa de Oxford, de Van Dyck (P1481) y del Combate de mujeres, de José de Ribera (P1124) (Texto extractado de: de la Plaza Santiago, F. J. [et al.]; Fondos de arte de la Diputación de Zamora, Zamora: Diputación de Zamora, 1989, pp. 48-49).