Una calle del Albaicín. Granada
1871 - 1872. Aguada, Lápiz, Pluma, Tinta parda sobre papel amarillento, 196 x 124 mmNo expuesto
Este dibujo, realizado en la hoja de un cuadernillo, muestra el interés de Fortuny por las arquitecturas y las intrincadas callejuelas del Albaicín, uno de los barrios más emblemáticos de Granada. Su ubicación en la ladera de la colina de la Alhambra había originado un singular trazado de calles empinadas al que se adaptaban las fachadas encaladas de las casas. Estas mostraban un zócalo que rectificaba la pendiente y que daba unidad a la arquitectura de la zona, que se caracterizaba también por sus ventanas enrejadas y sus balcones de forja protegidos por esteras. La propia estrechez de sus calles ofrecía un interesante campo para el estudio de la perspectiva, favorecido en muchos casos por la línea que sobre el empedrado dibujaba el canal por el que corría el agua procedente de los aljibes árabes situados en lo alto de la colina. Resulta difícil identificar la calle dibujada por Fortuny, ya que las características de su trazado y de los edificios se repiten en buena parte del barrio. Calles tan conocidas como la Gloria o la Tiña, en pleno corazón del Albaicín, ofrecen una perspectiva semejante. La vista está tomada desde abajo, con un primer plano apenas esbozado a lápiz y un fondo más detallado a tinta en el que se incide sobre los elementos arquitectónicos más destacados, como el enrejado de la primera ventana, la inclinación del pavimento de piedras que encauza el agua o el chaflán de la casa del fondo, fuertemente iluminada por el sol, que deja entrever un arco de herradura en el portón de entrada (Texto extractado de Gutiérrez, A. en: Fortuny (1838-1874), Museo Nacional del Prado, 2017, pp. 259-260).