Imagen de Khonsu o de Montu (Osiris, según Ajello)
Mediados del siglo XVIII. Lápiz sobre papel, 480 x 337 mmNo expuesto
Es una de las ocho obras egiptizantes perdidas a principios del siglo XIX. Según se deduce del Álbum del Carpio, el marqués tenía dos obras muy semejantes, ambas con el tipo de faldellín que presenta el presente dibujo. Acaso fue esa la razón por la que Felipe V e Isabel de Farnesio se contentaron con adquirir una para su colección. Sin embargo, resulta difícil decidir hoy, a la vista de los dibujos conservados, por cuál de las dos se decidieron: en efecto, las dos obras del Marqués diferían entre sí por la colocación de los brazos -aunque ninguna de las dos los presentaba como el presente dibujo- y ambas mostraban el mismo tipo de cabeza con tocado de tipo faraónico, que caía sobre los hombros por ambos lados y ostentaba en la parte superior lo que parece ser una versión reducida de la corona del Alto y del Bajo Egipto.
La consecuencia es obvia: adquiriese la pieza que adquiriese, Felipe V hubo de ordenar una restauración muy amplia, que afecto a los brazos, a los hombros y a la cabeza, y, para realizar esta última, el escultor encargado del trabajo se inspiro directamente en algunas otras obras de la colección, como las representadas en los dibujos 4, 9, 11, y 13. Por fortuna ha llegado hasta nosotros un molde de la mitad superior de la escultura, que sirve para sacar copias todavía hoy en el taller de vaciados de la Academia de Bellas Artes de San Fernando; en él se puede apreciar claramente que ambos brazos estaban cortados muy cerca de los hombros.
En cuanto a la iconografía, parece que nos hallamos ante una imagen de Khonsu o de Montu, y la interpretación como Osiris propuesta por Ajello debe ser desde luego descartada.
El dibujo forma parte del conocido como Cuaderno de Ajello formado por un conjunto de cincuenta y nueve hojas sueltas, con dibujos a lápiz, destinadas a servir de modelo para la realización de una serie de grabados, que debían ilustrar un catálogo descriptivo de las esculturas reunidas por Felipe V y su esposa, Isabel Farnesio, en el Palacio Real de La Granja de San Ildefonso.
Elvira Barba, Miguel Ángel, El Cuaderno de Ajello y las esculturas del Museo del Prado, Madrid, Museo del Prado, 1998, p.44-45