San Ildefonso y santa Leocadia
1753 - 1760. Mármol, 85 x 124 cmSala 085
La escena representa a San Ildefonso, arzobispo de Toledo (h. 600-667) y patrón de esta ciudad, cuando, según la leyenda piadosa, visitaba la tumba de la mártir Santa Leocadia, y, viendo que se levantaba de su sepulcro, tomó un trozo de velo que convirtió en reliquia.
Michel resolvió con maestría la gradación de planos del relieve y realizó un intenso estudio de plegados en la agitación de la escena. Olivieri reconoció que la de ‘Santa Leocadia está bien executada y concluida’.
Este relieve forma parte del conjunto de medallones destinados al ornato de las sobrepuertas de la Galería principal del Palacio Real. El proyecto, ideado por el erudito benedictino Marín Sarmiento, y aprobado por Fernando VI en 1748, proponía la creación de 46 medallones,44 y 2 para la entrada a la capilla: Un lado del Claustro se dedicaría a victorias militares que valoraban el heroísmo, otro a la ciencia promotora del conocimiento, un tercero trataría asuntos religiosos para animar al buen comportamiento y, el cuarto, a instituciones políticas que hacían relevante el buen gobierno.
En 1753, ya con un número inferior de medallones, 36, se inicia el encargo a los grandes escultores de la Corte, entre otros, Juan Domingo Olivieri, Huberto Dumandré, Michel, quien realiza dos medallones del ciclo religioso [E460 y E473].
Carlos III, en 1761, paraliza el proyecto al considerar los relieves excesivamente aparatosos. A su muerte solo se mencionan 32, relieves 28 acabados y 4 no concluidos, uno de estos últimos se perdió, y nunca se colocaron en su destino.
Al Museo llegaron, en el s. XIX, las treinta y una obras, nueve de ellas con escenas bélicas, siete con alegorías, siete con escenas religiosas y seis con consejos, además de dos representaciones de concilios, de las que una pudo ser diseñada para completar el conjunto de las asambleas políticas. En 1860 -1861 se instalan en las galerías bajas de la planta principal del Real Museo de Pintura y Escultura, donde permanecen hasta 1928. Ocho pasaron a las salas interiores del Museo, seis se depositaron en 1934 en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, según petición de la Corporación de 18 de junio del mismo año, para ornato del nuevo salón de actos, quedando el resto colocados en las galerías bajas, cerradas al menos, desde 1954. Actualmente, varios de ellos se exponen en las salas del siglo XVIII en la planta segunda.
[Azcue Brea, Leticia: ´Relieves de Roberto Michel para el Palacio Real Nuevo. Museo Nacional del Prado.´ En: Roberto Michel. Escultor del Rey, Real Casa de la Moneda, Madrid,2020, p.77-81 y 249 no 141]